EN ALICANTE Y VALENCIA
En apenas una semana el legado de María Zambrano tomó presencia en el Instituto Alicantino de Cultura Juan Gilabert y el Centro de Cultura Contemporánea del Carmen de Valencia. Fue con ocasión de presentar el libro María Zambrano, filósofa de la Generación del 27, publicado por la editorial Antígona. Participaron en la presentación las coautoras que estuvieron acompañadas por un público entrañable acostumbrado a asistir a actos relacionados con la cultura y la obra de la filósofa.
Al respecto, quisiera recordar que el pensamiento zambraniano reivindica el saber de las Humanidades y de la poesía. Se trata de un saber que procede de la razón poética con el que podemos imaginar otra forma de pensarnos a nivel subjetivo y colectivo. Se trata de un saber ausente en estos momentos en los que la educación se centra en objetivos instrumentales. Sobre todo se refiere a un saber que hoy hace más falta de nunca para restituir la vida en común, la comunidad, que nos ayude a ponernos en el lugar de quienes sufren y son más vulnerables.
En medio de una industria del espectáculo cada vez más potente hace falta reivindicar una política educativa que desarrolle la educación de la sensibilidad, la pasión por la lectura y el amor en la cultura en todas sus formas. Por eso mismo, fue tan emotivo presentar a María Zambranos en estos dos centros de cultura tan destacados como son el Instituto de Cultura Juan Gil Albert de Alicante dirigido por Pilar Tebar y el CCCC de Valencia dirigido por José Luis Pérez Pont. Al fin y al cabo, la filósofa, durante la contienda civil española, vivió en Valencia, conoció a Juan Gil Albert y estuvo trabajando en la entonces Casa de la Cultura, hoy sede de la Diputación de Valencia.
